En el reto de hacer compatible el uso con la conservación del Parque, las estrategias de regulación, comunicación y educación se hacen indispensables y se integran como un eje consustancial en la gestión. Más allá de mejorar la experiencia de los usuarios, se busca la complicidad ciudadana para la conservación del Parque, y en todo aquello que su misma existencia aporta a nuestra salud y bienestar, así como a la evolución de la cultura de la sostenibilidad.

Información y atención a los visitantes

La función educativa del parque se vincula a la voluntad de atender a las personas y de satisfacer sus necesidades. Por esta finalidad resultan esenciales los centros de acogida de visitantes, con personal y equipamiento adecuado. A la sierra de Collserola, con una larga tradición de uso y una alta frecuentación, la atención al visitante acontece un factor determinante y un elemento primordial de la gestión del uso público al Parque.

Comunicación institucional

El Programa de Comunicación del Consorcio se tiene que entender como una herramienta educativa para hacer llegar a la ciudadanía, a las organizaciones, a los entes consorciados y a las empresas, el mensaje de la importancia de preservar los valores naturales de la sierra. Y también, como una buena herramienta para conseguir alianzas, apoyos y confluencias con los grupos de interés externos.

Regulación del acceso y el uso público

Desde el órgano gestor, se pone especial incidencia en un doble objetivo: regular y a la vez concienciar de la necesidad de llevar a cabo actividades el máximo de respetuosas con el entorno. En este sentido se vela especialmente para unas Buenas Prácticas tanto a nivel de actividades individuales de los visitantes cómo en la organización de actividades colectivas.

Promoción de la participación

Para que la gestión del Parque sea efectiva hay que contar con la máxima complicidad ciudadana posible. Es con esta finalidad que se desarrollan toda una serie de programas dirigidos tanto a personas a nivel individual, como entidades, asociaciones y empresas, que tienen como objetivo divulgar los valores de la Sierra y hacerlas partícipes del que supone la preservación y mejora de los sistemas naturales y de los elementos construidos del Parque.

El curso en el Parque

El “Curso en el Parque” es una herramienta de trabajo que, desde hace más de veinte años, pone al alcance de los centros docentes, entidades y asociaciones los recursos educativos que ofrece la Sierra. Incluye un amplio abanico de propuestas educativas y recursos para la visita dirigidos principalmente al mundo escolar pero también a cualquier entidad que quiera incorporar el Parque Natural de Collserola dentro de su programación.

Documentación y asesoramiento (CDRE)

El CDRE (Centro de Documentación y Recursos Educativos) del Parque Natural se dirige a personas y entidades interesadas en Collserola y que, conocedoras del Centro de Información de visitantes, piden un nivel más exhaustivo de atención por motivos de estudio, investigación, preparación de actividades, etc.

El objetivo de la estrategia es mejorar la percepción que tiene la ciudadanía sobre los beneficios que aportan los espacios naturales, y así, entender la necesidad de establecer nuevas medidas reguladoras en Collserola.

Entre los grandes retos de futuro que hay que afrontar, la alta frecuentación es uno de los más preocupantes, tanto por los conflictos sociales derivados de la masificación como por el impacto ambiental que trae asociado, así como es el aumento del riesgo de incendio, la pérdida de biodiversidad y la degradación de los hábitats.

Estamos hablando de 3 millones de visitas anuales, con actividades de todo tipos, todos los días de la semana y prácticamente durante las 24 horas del día.

Collserola es un Parque Natural, donde la natura es salvaje y se rige por un equilibrio ecológico propio. El Parque es una pieza clave para la calidad de vida de las personas que viven alrededor. La gestión de los espacios naturales protegidos se focaliza en el control de actividades perturbadoras y la restauración de los hábitats, y al mismo tiempo hay que asegurar el disfrute de los visitantes y la buena convivencia entre todos los usuarios.